10 de Noviembre de 2016
Quiero hacer público éste comunicado por tres consideraciones:
°La primera sería que los actos del personal administrativo y de seguridad fueron: injustos, desproporcionales y qué decir ilegales.
°La segunda es la especulación acerca de mis alianzas políticas.
°Por último, la acción llevada a cabo por el preso Jessie Montaño y por mi no fue un acto de desobediencia del todo; y, en sí, más un acto de resistencia hacia el sistema, mal llamado, de justicia.
Lo único que acordamos fue poner un candado para resguardar nuestro espacio, que ha sido nuestra casa por más de 2 años. ¿Resguardarlo de qué? [de la imposición institucional].
En la madrugada del 9 de Noviembre llegaron (trasladados del reclusorio Norte) cerca de 30 personas. Según nos entrevistamos con ellas, ya se encontraban en el área de C.O.C. del Norte… Después de que pasaron como 40 minutos, algunos custodios llegaron con el director; quisieron romper el candado de nosotros y en sí lo lograron. Para, acto seguido, someter con excesiva violencia a Jessie. Y para cuando ya pudieron cargarlo para llevarlo fuera de Ingreso, yo les grité que lo certificaran acá (medicamente). Con eso fue suficiente para que a mi también me intentaran someter y me golpearan (con puñetazos en la cabeza y codazos).
Quiero hacer mención de algo que afirma el director del Reclusorio Sur. Él dice que de la mano de los promotores de la amnistía y de gente de la Subsecretaría del Sistema Penitenciaro nos está ayudando. ¿Qué moneda sería una persona que se «preocupa» por la situación de lxs presxs a costa de el «trabajo» de las instituciones representativas? Son las consecuencias del silencio represivo que acompaña el actuar de los legisladores. Primero se da por hecho que hubo intención de liberarnos; así se descarta la opinión y las necesidades del diario vivir como presxs. No defendemos privilegios regalados por poderosos. Defendemos la digna resistencia ajena a la corrupción y a las negociaciones del poder.
Ahora temo más por mi integridad al interior del reclusorio, así mismo por la de familiares y amigos en el exterior. Sin embargo sostengo la superación del miedo para: responzabilizar a custodios y administrativos (y particularmente a Tonatiuh, el director del Reclusorio Sur) así como a los funcionarios de la Subsecretaría del Sistema Penitenciario del Distrito Federal, por las agresiones que sufrimos y también por los robos de los que se beneficiaron… al despojarme de algunas pertenencias.
Luis Fernando Sotelo.